El documento fue editado por un grupo de expertos independientes encabezado por John F. Helliwell, de la Vancouver School of Economics, de la Universidad British Columbia y el Canadian Institute for Advanced Research (CIFAR), Richard Layard, director del Well-Being Programme en el Centre for Economic Performance de la London School of Economics, y Jeffrey D. Sachs, director del Earth Institute de la Universidad de Columbia, director del SDSN (Sustainable Development Solutions Network) de la ONU y asesor especial del secretario general de la ONU.
El informe, que se puede descargar en este enlace: http://unsdsn.org/files/2013/09/WorldHappinessReport2013_online.pdf, utiliza seis variables que se han estudiado en un total de 150 países: el PIB per cápita real, la esperanza de llevar una vida sana, el respaldo social (tener a alguien con quien contar), la libertad percibida a la hora de tomar decisiones en la vida, la libertad de corrupción y la generosidad. Merece la pena echarle un ojo.
No sólo es una mera relación de estadísticas sino que el informe también establece algunas premisas y recomendaciones. Por ejemplo, asegura que la felicidad de la población tiene consecuencias positivas en el desarrollo de los países porque la gente feliz vive más tiempo, es más productiva, gana más y son mejores ciudadanos, por lo que el bienestar debería desarrollarse tanto por su propio bien como por sus efectos colaterales.
El trabajo destaca también la importancia de la salud mental como un ingrediente más de la felicidad individual. En los países desarrollados se están registrando muchos problemas de enfermedades mentales y muchas veces no están recibiendo tratamiento adecuado cuando, asegura, existen tratamientos eficaces asequibles que si se aplicaran el mundo sería un lugar más feliz.
Algunos datos interesantes del informe son:
- La nota media de “felicidad mundial” es un 5,1 sobre 10.
- Los países del norte de Europa son los más felices del mundo. El primero es Dinamarca, seguido de Noruega, Suiza, Holanda, Suecia, Canadá, Finlandia, Austria, Islandia y Australia.
- España ocupa la posición 38.
- Respecto al anterior informe Latinoamérica y el África subsahariana han subido en su índice de felicidad mientras que los países industriales han bajado.
- 41 países han empeorado, entre ellos España, Grecia, Portugal e Italia, y han mejorado 60.
- Los peores son Togo, el último puesto, Benín, República Centroafricana, Burundi y Ruanda.
Concluye el informe que lo que pretende es contribuir a la creciente demanda de los ciudadanos de que la política esté más estrechamente ligada a lo que de verdad importa a la gente y que define sus vidas. Después de dejar constancia de que los líderes mundiales está empezando a tomar conciencia de la importancia del bienestar, se asegura que el informe ofrece clara evidencia de que la medición sistemática y el análisis de la felicidad puede enseñar mucho sobre las formas de mejorar el bienestar del mundo y el desarrollo sostenible.