El otro día me llevé una grata sorpresa al leer en la última página de EL PAIS (lunes 21 de marzo de 2011) una entrevista con Martin Seligman en San Sebastián. Tiempo habrá para hablar de sus teorías en esta página pero me ha resultado gratificante que acudiera a San Sebastián a un congreso, Diálogos de Cocina, con su mujer y tres de sus siete hijos, por cierto que siempre viaja con su familia como práctica terapéutica y educacional para mejorar sus fortalezas.
Y es que una de las principales aportaciones de Seligman dentro de la psicología positiva es la lista de 24 fortalezas y virtudes que han sido desarrolladas por el Values in Action Institute (VIA) bajo la dirección de Martin Seligman y Christopher Peterson. Es un cuestionario de 245 ítems tipo con 5 posibles respuestas cada uno, que mide el grado en que un individuo posee cada una de las fortalezas, en breve hablaré de ellas pues es una de las razones por las que me encuentro en esta aventura.
Bueno, a lo que íbamos, en la entrevista me sorprendió la cara de buena persona y de “disfrutador” de la vida que tiene actualmente, además no desentona en un ambiente vasco, mirar la foto, por favor.
En la entrevista también me llamó la atención cuando habla de la Perma, traducido por la periodista por pastel, que define como los cinco elementos a partir de los cuales medir la felicidad, tomar nota: emociones positivas, la sintonía con el entorno, la pertenencia a un grupo o el altruismo, los logros o las metas.
Seligman llega a comparar la gastronomía con la psicología positiva, pensando en un guiso de liderazgo, motivación y psicología, qué grande!!!
Para terminar, una frase que refuerza lo que aquí ya hemos dicho sobre la búsqueda de la felicidad:
“Se puede aprender a ser feliz, pero hay que practicar. No se trata de trabajar solo unos elementos y otros no, sino que todos juntos hacen que sea posible ser más felices.”
To be continued…